A cada cual lo que es de cada cual. Ha quedado constatado en el sumario de la Operación Edén que Paulino Rivero telefoneó al alcalde de Arona para pedirle que hiciera algo por su sobrina, Iballa Rivero Rodríguez, que se presentaba a las pruebas para ser policía local de aquel municipio tinerfeño.
La ayuda no pudo prosperar porque, según fuentes conocedoras del asunto, la aspirante a guindilla fue sorprendida copiando y consecuentemente retirada de la convocatoria.
Después de ese pinchazo (el de la sobrina, no el otro), la aspirante a policía se presentó a las pruebas de acceso a la Policía Autonómica Canaria, más conocida como Guanchancha, pero no parece que en esa ocasión (mayo pasado), la chica recibiera un empujoncito de nadie, porque no superó la primera criba, consistente en la prueba de conocimientos de idiomas. Alcanzó un 69.5 y no hubo manera.
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